Pieris brassicae – MARIPOSA DE LA COL

No hay que darle muchas vueltas al nombre de esta dulce mariposa, es sin duda, la que a hurtadillas inunda con sus grupos de huevos amarillos nuestras coles, berzas y demás verduras parecidas. Huevos de los que a los pocos días nacen unas pequeñas larvas, voraces como ellas solas, que causan daños bastante considerables en las plantas hasta que se transforman en crisálidas.

Por lo menos en mi caso, durante el resto del año no noto sus destrozos, pero cuando llega el otoño y las veo revolotear por la huerta, ya sé que tengo que dedicar un rato a buscar sus puestas de huevos y recortarlas antes de que nazcan las larvas. Siempre alguna se escapa y entonces ya me encuentro con un grupo de ellas empezando a mordisquear las hojas.

Pero bueno, qué se va a hacer, es el precio que hay que pagar por verlas revoloteando alegremente por la huerta, que siempre alegran el ánimo. Además es una especie bastante abundante, tanto que como podéis ver, os pongo fotografías de todas las fases por las que pasan hasta su transformación en mariposas, además de un pequeño vídeo en el que pude captar la sincronizada puesta de huevos de un individuo adulto.

Fue una suerte poder grabar el vídeo porque cuando te acercas suelen salir rápidamente volando, pero este ejemplar estaba tan concentrado que ni se inmutó y siguió con su quehacer mientras le grababa como si no pasara nada.

Ah y una pequeña advertencia, las orugas cuando se tocan desprenden un olor un poco desagradable, por lo que para manipularlas conviene usar guantes. Y otra cosa, yo probé a dárselas a las gallinas y tras comer las berzas, me dijeron que las orugas las comiera yo, parece ser que no son de su agrado.

Puesta de huevos
Oruga en pleno desarrollo.
Crisálida.
Hembra.

Filo: Arthropoda / Subfilo: Hexapoda / Clase: Insecta / Superfamilia: Papilionoidea / Familia: Pieridae / Subfamilia: Pierinae / Tribu: Pierini.

Nombre científico: Pieris brassicae (Linnaeus, 1758).

Nombres populares: blanquita o blanca de la col.

Los machos de las mariposas de esta especie son de color blanco, con una mancha negra en la esquina superior de las alas delanteras. Las hembras presentan dos puntos negros en las alas delanteras y uno en el margen delantero de las alas posteriores, además son más grandes que los machos, pudiendo alcanzar los 6 centímetros de longitud. Es de destacar que estas manchas suelen ser más pronunciadas en las generaciones nacidas durante la estación estival.

Son activas desde el inicio de la primavera hasta finales del otoño, sacando varias generaciones durante la misma temporada. Cuando llega el invierno la última generación lo pasa en forma de pupa o crisálida, emergiendo las mariposas con la llegada del buen tiempo y realizando la primera puesta.

Las puestas las hacen en la parte inferior de las hojas, depositando varias decenas de huevos amarillos agrupados. Miden aproximadamente 0’6 mm. de ancho y 1’5 mm. de alto.

Los huevos tardan poco en eclosionar. Entre 5 y 15 días nacen las larvas, que tras pasar por varias mudas, entre 15 o 40 días, dependiendo de la alimentación, se transforman en crisálidas, de las que salen las mariposas una o dos semanas más tarde.

Las larvas al nacer permanecen unos días todas juntas en grupo, dispersándose por la planta a medida que se van haciendo más grandes y realizando mudas. Llegan a medir 5 cm. de longitud y son de color verde con puntos negros y tres líneas amarillas a lo largo del cuerpo en la parte superior y partes inferiores del costado, presentando numerosos pelos cortos en su parte dorsal.

Las crisálidas son de color amarillo verdoso con puntos negros y aunque suelen quedar en la planta nutricia, también abandonan la misma para esconderse entre piedras y huecos en sus proximidades. Antes de formarla se atan con un cinturón a lo largo de la parte central para sujetarse.

En España se encuentra distribuida por la península ibérica y el archipiélago balear.

Pollicipes pollicipes – PERCEBE

Para mi, uno de los mayores placeres que me puede ofrecer la vida, es acercarme a la orilla del mar o la mar, como cada cual quiera decirlo, y disfrutar de ese olor inconfundible y de ese aire que me llena los pulmones como en muy pocos lugares. Así que siempre que puedo, que es bastante menos de lo que me gustaría, aprovecho para acercarme y disfrutarlo, porque a veces se encuentra uno cosas como de la que hablo en esta entrada.

Y es que después de uno de los paseos playeros de este pasado verano, en el consiguiente curioseo habitual entre las rocas, vi estos magníficos ejemplares en una playa de Cantabria. Me sorprendió un poco encontrarlos tan grandes porque la zona está siempre bastante concurrida y no es que estuvieran tampoco muy escondidos, pero bueno, es cosa de alegrarse, ya que demuestra que poco a poco vamos tomando un poco más de conciencia con proteger el medio ambiente.

Al ser otro de los animalejos que tenemos asociados con la cazuela y ser tan apreciados en gastronomía, era una pena no hace tantos años, ver las rocas mas peladas que la cima del Everest. En un lugar por el que pasan miles y miles de personas, unos que arranco yo, otros que arranca el otro, pues al final lo dicho, era un desastre. Ahora da gusto ver a los adultos enseñándoles a los niños algunos de estos seres vivos que viven en el mar y que de otra forma no iban a poder ver, si no es en la pescadería o en un supermercado. Pero no es lo mismo, ni mucho menos.

La verdad es que fue un gustazo verlos tan majos ahí entre los mejillones. El hecho de tener su hábitat ambas especies en la zona intermareal, es decir, la que queda entre la bajamar y la pleamar, hace que sea frecuente encontrarlos habitando juntos y en buena armonía, como es el caso.

Nombre científico: Pollicipes pollicipes (Gmelin, 1790).

Filo: Arthropoda / Subfilo: Crustacea / Clase: Thecostraca / Subclase: Cirripedia / Superorden: Thoracica / Orden: Pedunculata / Familia: Scalpellidae.

Los percebes tienen dos partes claramente diferenciadas: la superior llamada uña y la inferior denominada pedúnculo. En total llega a medir hasta 12 centímetros de longitud.

La uña esta cubierta por una veintena de placas calcáreas, de un color blanco, desde grisáceo hasta amarillento. Cinco de estas placas son más grandes que las restantes y las otras se sitúan entre estas y sobre la parte inferior del percebe. En su interior se encuentran la mayor parte de los órganos vitales del animal.

El pedúnculo, con el que se adhiere a las rocas a través de una sustancia cementosa que segregra por el extremo, es cilíndrico, carnoso, puede presentar tonalidades negras, verdosas, marrones o rojizas, y esta cubierto por pequeñas escamas formando una piel áspera y consistente.

Respiran captando el oxígeno disuelto en el agua, a través de constantes movimientos de sus cirros, que son seis pares de pequeños filamentos situados en la uña. Estos cirros también le sirven para recoger el fitoplancton, microorganismos y otras partículas en suspensión de las que se alimenta y llevarlas a la boca, quedándose con los nutrientes y expulsando las sustancias no comestibles.

Ambas necesidades, la respiratoria y la alimentaria, hace que se sitúen en las zonas más expuestas y batidas por el mar. De ahí la dificultad de su extracción, su alto precio económico y la gran cantidad de bajas sufridas entre los percebeiros a lo largo de los años.

Son hermafroditas pero necesitan de otro individuo para fecundarse. Los órganos sexuales masculinos están situados en el último par de cirros y los femeninos en el pedúnculo. Tras la fecundación, que suele ser dos veces al año, una en primavera y otra en verano, los huevos permanecen en una cavidad llamada paleal durante doscientos días hasta que eclosionan y salen las larvas, que son expulsadas y permanecen flotando entre el plancton, realizando una serie de mudas durante los dos siguientes meses, para acabar transformándose en un caparazón bivalvo que ya puede adherirse a la roca, donde se transforma en adulto.

Dos meses después empieza su desplazamiento por la roca, buscando grupos de adultos de su misma especie, donde se fija y pasa el resto de su vida.

Como es bien sabido se halla ampliamente distribuido por toda la cornisa cantábrica, aunque también se encuentra en la franja mediterránea.

Oryctes nasicornis – ESCARABAJO RINOCERONTE EUROPEO

Sin lugar a dudas es lo más parecido que tenemos a la fauna africana en nuestro continente, de ahí evidentemente le viene el nombre. Y es que su cuerno no puede ser más semejante al del mamífero en cuestión.

Mucho tiempo llevaba deseando ver un ejemplar de esta singular especie pero nunca había conseguido divisar ninguno. La suerte quiso que el otro día me llegara un mensaje de whatssap de unos amigos, en el que enviaban varias fotografías de este bello insecto, a la vez que me decían que lo habían cogido para enseñármelo. Infinitas gracias por ello les debo.

Tan pronto como pude allí me planté y tras colocarlo sobre el tronco de un árbol me puse a hacerle varias fotos hasta que lo dejé tranquilo para que siguiera con su vida. No era cosa hacerle perder al pobre mucho más tiempo, porque en estado adulto su ciclo vital sólo dura unos meses y lo dedican completamente a tareas reproductivas.

Lo que me llamó mucho la atención es la fuerza que tienen. Mientras le hacía las fotografías, para que no avanzara lo paraba con la mano, y el escarabajo empujaba con el cuerno con una fuerza sorprendente, que casi me hacía daño. Además cabezón como él solo, no tengáis miedo que retrocedía, para adelante como su tocayo africano. Luego cuando acabé, se cayó de la rama del árbol al suelo y empujando con el cuerno empezó a escarbar en la tierra hasta que se enterró completamente. La tierra no es que estuviera muy compactada, pero tampoco era tan blanda para que le costara tan poco trabajo. Y ahí se quedó, imagino que buscando tranquilidad hasta que pudiera continuar con sus quehaceres, o a saber, empujando como empujaba igual está ya a un kilómetro de profundidad.

Para que os hagáis una idea sobre su fuerza os comento que de lo que leído sobre él me ha sorprendido encontrar un dato curioso, y es que son capaces de mover 800 veces su propio peso, ahí es nada. Sobre el cuerno comentar que además de para escarbar en la tierra lo utilizan para luchar contra otros machos durante el celo y derribarlos de las ramas cercanas a las hembras.

Estos bichejos tienen un serio problema y es que se sienten atraídos por las fuentes de luz. Y a la luz de una farola un escarabajo tiene muchos papeles de llevarse un pisotón o alguna desgracia parecida, además de lo fácil que es que sea detectado por algún depredador. Pero nada debemos temer de ellos porque son completamente inofensivos. Por cierto, cuando caen al suelo no pueden remontar el vuelo, ni que decir tiene que una buena obra sería recogerlos y ponerlos en una superficie elevada, a salvo de gatos y aves rapaces sobre todo. Y sinceramente, insectos tan espectaculares son dignos de que hagamos un esfuerzo por conservarlos para que las generaciones futuras puedan seguir disfrutando con su observación.


Filo: Arthropoda / Subfilo: Hexápoda / Clase: Insecta / Orden: Coleoptera / Suborden: Polyphaga / Infraorden: Scarabaeiformia / Superfamilia: Scarabaeoidea / Familia: Dynastidae

Nombre científico: Oryctes nasicornis (Linnaeus, 1758).

Esta especie cuenta con numerosas subespecies, siendo la que habita en la península ibérica Oryctes nasicornis grypus Illiger, 1803.

Es de los escarabajos más grandes que tenemos, lo normal es que midan entre 3 y 4 centímetros, pero pueden llegar a alcanzar y sobrepasar los 5 cm. Son de color castaño oscuro, cuerpo rechoncho y los machos poseen un gran cuerno curvado hacia atrás, mientras que las hembras sólo tienen una pequeña protuberancia en forma de cono.

Los adultos empiezan a aparecer durante la primavera y lo hacen hasta el otoño, siendo los meses de junio y julio los de mayor abundancia. Vuelan al atardecer y no son muy activos, ya que su vuelo es sumamente torpe, quizá motivado por su tamaño, siendo de hábitos preferentemente nocturnos. En estado adulto no se alimentan mucho, limitándose a libar savia procedente de las heridas de algún árbol.

Su ciclo vital dura entre dos y cuatro años, pudiendo ser más si las condiciones no son las adecuadas. De ser así la larva del tercer ciclo entra en un estado denominado diapausa en el que permanece inactiva. Antes de su metamorfosis final al estado adulto alcanzan un tamaño considerable, entre 10 y 12 centímetros. Son de color blanco, a excepción de la cabeza que es gris oscura, tienen forma cilíndrica y poseen tres pares de patas. Cuando van a pasar al estado de ninfa se entierran más profundamente para construir un refugio, en el que permanecen mientras se transforman en el imago o individuo adulto.

En estado de larva se alimenta exclusivamente de madera podrida, parece ser que exceptuando la de las coníferas, y materia en descomposición, nunca seca, ya que necesitan un cierto grado de humedad, por lo que no debemos temer por nuestros cultivos frutales.

Rumina decollata – CARACOL DEGOLLADO

Muchas veces cosas delicadas y aparentemente inofensivas resultan esconder una oscura realidad, y cuando vas sabiendo cosas sobre ellas descubres que de delicado tienen poco y de inofensivo menos. Así me ha pasado a mi con este caracolillo, que de sentir pena por él, he pasado a creer que menudo salvaje está hecho.

Recuerdo que la primera vez que vi un ejemplar de esta especie pensé que al pobre se le había roto la concha. Lejos estaba de saber que cuando son jóvenes tienen la espiral completa, pero a medida que van creciendo está se le va rompiendo y truncando, quedando de esa forma y de ahí le proviene el nombre de caracol degollado.

Pero claro, al seguir viendo más ejemplares con la concha rota, pues ya me puse a investigar sobre ellos. Como me ha parecido una cosa curiosa e igual mucha gente tampoco los conoce, me pareció apropiado dedicarles una entrada en el blog y en ello estoy.

Tampoco sabía que es una especie muy voraz y omnívora, un gran cazador que se alimenta de otros caracoles y babosas, así como de sus puestas, y de pequeños insectos y lombrices. Esta capacidad depredatoria ha sido utilizada para combatir biológicamente plagas de otros caracoles y babosas en multitud de países donde ha sido introducido con este fin.

Mi opinión personal es que si la plaga es a gran escala su utilización puede ser beneficiosa, ya que aunque también comen materia vegetal, tanto verde como en descomposición, los daños que causen en los cultivos serán nimios en comparación con los beneficios conseguidos; pero a pequeña escala en un huerto doméstico, cuando acaben con las babosas y caracoles, igual el remedio es peor que la enfermedad, y sinceramente, no se lo aconsejo a nadie, no vaya a ser que nos quedemos sin cosecha.

Además, es suficiente contar con un único ejemplar para hacernos con un gran ejército de ellos, porque aunque son hermafroditas, tienen la capacidad de autofecundarse ellos mismos. Vamos, que empiezas teniendo uno solo y acabas con una plaga.

Resumiendo, voracidad y autofecundación, mala combinación. Mejor dejemos que la naturaleza siga su curso, veámoslos donde estén distribuidos naturalmente y dejémonos de experimentos.

Ejemplar juvenil con la concha completa

Reino: Animalia / Filo: Mollusca / Clase: Gastropoda / Subclase: Pulmonata / Orden: Stylommatophora / Familia: Subulinidae / Subfamilia: Rumininae

Nombre científico: Rumina decollata (Linnaeus, 1758).

Otros nombres: caracola, caracola de tierra, caracol destructor y caracola mediterránea.

La concha, que puede llegar a superar los 4 centímetros de longitud, es alargada, dura, cónica con forma de espiral, siendo la última vuelta mucho más grande que las anteriores. En los ejemplares jóvenes presenta entre 8 y 10 vueltas, conservando los adultos sólo 4 o 6 de ellas. Suele ser de color pardo brillante, con el labio de apertura de color blanco y cuando se vacían se vuelven blancas al decolorarse por el sol.

El molusco es pequeño, blanco con manchas oscuras en el cuerpo, aunque a veces es negro grisáceo o verde pardusco. Las antenas superiores son largas y de color gris tirando a transparentes. Su lengua con la que tritura a sus presas, es una lámina de quitina cubierta de infinidad de diminutos dientes, a modo de lija.

Las puestas, que son enterradas en el suelo, suelen realizarlas entre mayo y octubre, constando de unos 40 huevos de cáscara dura y forma cilíndrica de 2’5 mm. de diámetro

No tienen una longevidad muy larga, ya que no suelen vivir más de dos años.

Prefiere los lugares húmedos, pero tolera bien condiciones secas y ambientes soleados, siempre por debajo de los 2.000 metros de altitud.

Es de hábitos predominantemente nocturnos y aumenta su actividad los días de lluvia.

Extendido por la totalidad de la península ibérica.

Passer domesticus – GORRION COMUN

Mucho había tardado en subir al blog una entrada sobre la más común de nuestras aves. La tardanza era debida a querer tener una buena y cercana fotografía de un ejemplar y la dificultad que estaba teniendo en conseguirla. Pero como casi todo en esta vida, basta que quieras una cosa para no tenerla, del mismo modo que en el momento que te olvidas de ella, se te presenta la ocasión, como ha sido el caso.

Y es que, tras tirar un montón de fotografías, no había una que me acabara de gustar o en la que se viera con claridad. Hasta que la otra mañana después de atender a los animalillos en la finca, me senté a unos pocos metros de la puerta del gallinero, de donde había salido instantes antes, y al rato sale pegando saltitos este juvenil ejemplar que veis. A saber dónde estaría metido, porque el tiempo que estuve dentro ni cuenta me di.

Lejos de remontar el vuelo y escapar a toda velocidad, se encamina hacia donde yo estaba y se me queda parado delante de los pies. Pues ahí estuvimos un buen rato mirándonos, sin miedo ninguno, ignorancia de la juventud imagino, porque de haber sido yo el gato gordo ese que a veces se deja ver por las inmediaciones, no habría tenido tan buen final.

En conclusión, le pude hacer un montón de fotografías, le eché mano y lo puse en el borde del bebedero de las gallinas para que bebiera agua, cosa que hizo con avidez. Igual era ese el motivo de andar medio atontado por la vida. Y cuando acabó, lo volví a coger para ayudarlo a salir del enmallado de tela y soltarlo fuera del recinto sin problemas. Se alejó volando alegremente y no lo volví a ver.

Aunque es uno de los pájaros más comunes, la verdad es que su número ha decrecido bastante. Y aunque en ocasiones son molestos como vecinos, el aporte que nos brindan como insecticida natural creo sinceramente que supera con creces los daños que pueden ocasionar. En consecuencia, animo al que pueda, a ayudarles con la alimentación y la bebida durante la época invernal, seguro que el beneficio que obtenemos a la larga se verá multiplicado con creces.

Filo. Chordata / Orden: Passeriformes / Familia: Paseridae.

Nombre científico: Passer domesticus (Linnaeus, 1758).

También se le conoce como pardal.

Nuestros gorriones pueden llegar a medir 16 cm. de longitud, a pesar unos 40 gramos y tener una envergadura alar de 21 cm.

Presentan una complexión robusta y un pico fuerte, cónico y grueso. Los machos tienen las mejillas grisáceas, capuchón de color gris, peto negro y una mancha de color marrón rojizo detrás de los ojos rodeando el cuello. La parte superior es marrón con manchas negras y las alas tienen una franja blanca. Las hembras, que son de menor tamaño, presentan una coloración gris uniforme en el pecho y partes inferiores; parda en las alas, cola y parte superior de la cabeza, y una pálida franja superciliar grisácea.

Las patas son de color marrón claro rosáceas y el iris es marrón rojizo. El pico es de color marrón oscuro con la base amarillenta, a excepción de los machos durante la época de cría que se les vuelve negro, y de los ejemplares jóvenes que lo tienen marrón oscuro con la punta amarilla.

La época de celo dura de marzo a septiembre. Durante ella pueden construir casi en cualquier sitio y con cualquier material un nido, en el que la hembra depositará entre 3 y 7 huevos, que ambos padres incubarán durante 11-15 días. Los polluelos permanecen en el nido entre 13 y 18 días, lo que les permite sacar varias camadas al año.

La alimentación es omnívora, como todos sabemos comen de todo, aunque su alimentación original fuera granívora, y su distribución está extendida a la totalidad de la península ibérica, donde está asentado todo el año y siempre ligados a enclaves humanos.