Dando un paseo una tarde de este pasado verano, entre las dunas del parque natural de las Dunas de Liencres, en Cantabria, me era imposible no quedarme mirando para unas llamativas orugas, que con un apetito insaciable, no paraban de comer plantas como si no hubiera un mañana.
Pero lo que más llamaba la atención no era su voracidad, que también, ya que como podéis ver en el vídeo parecen trituradoras. Lo que llevaba casi sin querer la vista hacia ellas era su tamaño y su bonito colorido. Algunas eran tan grandes como un dedo, y con esa variedad de colores, como comprenderéis, imposible mirar hacia otro lado.
Sin duda, es una de las orugas más bonitas que he visto. Amarillos, verdes, naranjas…, y destacando sobre ellos, negros con puntos blancos, como si avisara que acercarse a ella era un peligro, invitando a continuar viaje a posibles amenazas.
Lo que me hizo mucha gracia fue observar las huellas que dejaban sobre la arena en sus desplazamientos entre planta y planta. Era un doble surco de puntos, que como no hacía viento que los borrara, permitían ver con claridad el camino que habían seguido en su insaciable búsqueda de alimento.
Investigando más tarde, resulta que la planta que comían era Lechetrezna de las playas, cuyo nombre científico es Euphorbia paralia, de ahí que el nombre de esta oruga sea Hyles euphorbiae. Y aunque pueden comer otros tipos, esta y otras de su género, son sus plantas nutricias por excelencia. Se ve que no se mataron mucho a la hora de bautizarla.
A las orugas no es muy conveniente molestarlas porque pueden regurgitar el contenido del estómago, y como las lechetreznas de las que se alimentan tienen un alto contenido en un látex tóxico e irritante, además de tener que soportar el nauseabundo olor, pueden provocarnos alguna reacción urticante.
Y por último, contaros que de esta preciosa oruga, tras su paso por el estado de crisálida, sale una mariposa nocturna, lo que llamamos vulgarmente polilla, bastante bonita también. Este año no he conseguido fotografiarla, así que queda pendiente para la próxima temporada.
Antes había muchísimas, ahora apenas a
hay, recuerdo en Canallave hace más de 10 años, que había decenas en las lechetreznas…¿Qué ha pasado?
Acabo de ver una en cuchia y es impresionante verla. Una pasada.
La verdad es que son preciosas.